Tipos de impuestos para empresas y la mejor forma de afrontarlos

Comenzar una nueva idea de negocio siempre es emocionante. Pero también suelen surgir muchas dudas al respecto. Algunas tienen que ver con el desarrollo de la propia idea, otras con logística. Y, entre las más frecuentes, nos encontramos con que no tenemos claros los tipos de impuestos para empresas que se nos van a aplicar. Ni sabemos cómo hacerles frente. Por eso, vamos con una guía explicativa.

Tipos de impuestos para empresas, y cómo hacerles frente

Los impuestos que se aplican dependen de varios factores entre ellos, la localización y el tamaño de tu empresa. Según está última característica, pueden ser:

  • Microempresas: De hasta diez empleados.
  • Pequeña empresa: De entre 11 y 49 empleados.
  • Mediana empresa: Comprende desde 50 hasta 250 empleados.
  • Y grandes empresas, que superan los 250 empleados.

Conociendo estas cifras y partiendo de que desarrollemos la actividad en territorio español, analizamos los tipos de impuestos aplicables, y os explicamos cómo podemos hacerles frente:

IVA

Es un impuesto común que aplica a todas las actividades económicas. Incluso a aquellos autónomos o freelancers que no tengan empleados a su cargo. Sin embargo, la cuantía no es la misma, puesto que existen distintos tipos de IVA, aplicables según el sector del producto o servicio que se vaya a gravar. Son los siguientes:

  • Superreducido: Aplica el 4% del valor de productos de primera necesidad, así como libros o medicamentos.
  • Reducido: En este caso el gravamen corresponde al 10% de productos alimenticios, bienes agrícolas o ganaderos, productos veterinarios, algunos productos farmacéuticos o compraventa de vivienda.
  • General del 21% sobre el resto de productos.

Cada factura que emitas, como proveedor, debe incluir tu porcentaje de IVA sobre el precio de tu producto o servicio. La liquidación del IVA se realiza de forma trimestral, sumando el total de todas las facturas que hayas emitido (IVA repercutido), y restando aquellas que hayas recibido (IVA soportado), siempre que tengan relación con tu actividad empresarial.

Impuesto de sociedades

Se aplica a sociedades mercantiles y personas jurídicas, por lo que los freelaancers quedan exentos. Actualmente, está fijado en un 25% de los beneficios totales de la empresa, con las siguientes excepciones:

  • Para empresas de nueva creación, será del 15% durante el primer período impositivo.
  • En algunas comunidades, como País Vasco o Navarra, este impuesto alcanza el 28%.

IRPF

Grava la renta de las personas físicas. Una empresa no “paga” este impuesto, pero sí debe gestionarlo adecuadamente. En este caso también aplica el principio de progresividad, puesto que sobre una renta de 15.000€ se aplicará un 24% de IRP, mientras que sobre otra de 70.000€ se llega a aplicar el 45%.

Otras cotizaciones a la seguridad social

Si eres freelancer, posiblemente hayas oído hablar del pago de autónomos. Esto significa que es tu cotización a la Seguridad Social. Debe hacerse desde el primer día que se emprenda la actividad y los pagos son iguales para todos, aunque podemos beneficiarnos de algunas bonificaciones por comienzo de negocio.

¿Cómo afrontar el pago de los distintos tipos de impuestos?

No hay nada que podamos (o debamos) hacer para evitar el pago de los impuestos que nos corresponden. Sin embargo, sí podemos realizar algunas acciones que nos permitirán que sea más llevadero:

  • En muchos casos, tu empresa (o tú mismo, si eres autónomo) funciona como intermediario entre tu cliente y la propia Hacienda. Ten en cuenta por ejemplo que, cuando cobres una factura con IVA incluido, ese porcentaje no te pertenece.
  • Esto nos lleva a pensar que es fundamental contar con una buena planificación contable de la empresa y de los impuestos de los que debemos hacernos cargo. Tener cuentas reales, en las que veamos si podemos hacer frente cómodamente a nuestras obligaciones.
  • En esta planificación deberíamos tener “reservado” el dinero correspondiente al pago de IVA, cuotas de autónomos y sociedades, de forma que no nos pille desprevenidos cuando llegue el momento de realizar liquidaciones.
  • En ocasiones, puede ocurrir que los ingresos hayan remitido. Sin embargo, podemos tener que hacer frente a una carga impositiva alta. Normalmente, se permite el pago fraccionado, siempre y cuando la deuda esté domiciliada. Aquí podemos ver las distintas modalidades de pago que nos ofrece la Agencia Tributaria.

En resumen, existen distintos tipos de impuestos para empresas a los que deberemos hacer frente a lo largo de la vida de nuestro negocio, y es fundamental que hagamos una buena planificación para que no afecten a nuestra economía empresarial. De ese equilibrio dependerá el éxito económico de nuestro proyecto. Por eso, os ofrecemos Quantum Business – Empresas Conta, el software que permitirá mantener tus impuestos bajo control y en continuo seguimiento.

Picture of Quantum economics
Quantum economics

Quantum economics nace de la unión de una Asesoría con más de 50 años de experiencia, y una empresa de Desarrollo de Software en la nube con más de 20 años de experiencia.

Tabla de contenidos

Compartir:
Artículos relacionados:

A la hora de escoger el mejor método de pago online para tu negocio hay varios aspectos que debemos tener en cuenta Naturalmente el propio método que escoger[...]

Desde Quantum y como parte de nuestra tarea de ofrecer software de contabilidad y gestión para empresas queremos hablarte de algunas formas de aplicar el control horario en[...]

Quantum Economics como expertos desarrolladores de softwares de facturación queremos ofrecerte algunas claves para los casos de impago de factura de los clientes Esta es desafortunadamente una situación[...]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *